¿Cuál es la diferencia entre un eQart y un AMR?

A medida que la automatización continúa convirtiéndose en una necesidad en aumento para pequeñas y grandes compañías por igual, la pregunta ya no es si se debe realizar automatización sino cómo hacerla.

Hay muchos factores que se deben tomar en cuenta cuando se planifica el viaje hacia la automatización. No todas las instalaciones son iguales con respecto a presupuesto, diseño, capacidad de carga, materiales que necesitan ser movidos, interacción humana, etc. En FlexQube, hemos dado el salto desde carros manuales de manejo de materiales hacia bloques de construcción automatizados para ir de la mano con nuestro concepto. Dos sectores principales de automatización han aparecido, y estos son AGVs (Automatic Guided Vehicles o Vehículos Automáticamente Guiados) y AMRs (Autonomous Mobile Robot ó Robot Móvil Autónomo). Debajo explicaremos cuáles son las diferencias principales entre un AMR y nuestro eQart.

¿Qué es un AMR?

AMR son las siglas de Autonomous Mobile Robot ó Robot Móvil Autónomo, y lo que separa un AMR de otros productos automatizados de manejo de materiales es que navega utilizando navegación natural. Esto es una manera para que el robot navegue “libre” de asistencia, lo que significa que puede navegar a través de tus instalaciones sin la ayuda de alguna cinta magnética, cableado u otro tipo de asistencia. Mientras que hay muchos beneficios de tener navegación natural, esto puede venir con un costo elevado, gran tiempo de implementación, tiempo de inactividad si la ruta requiere ser cambiada o si ocurre un error.

¿Qué es el eQart?

El eQart es un carro de manejo de materiales autónomo y controlado a distancia. Al utilizar bloques de construcción inteligentes y complementándolo con módulos digitales como motores, batería, unidad de control y sensores; podemos ofrecer un concepto flexible, asequible y fácil de usar. El eQart tiene una flexibilidad de tamaño líder en el mercado desde 910 x 840 mm hasta 2510 x 2510 mm, así como diferentes tipos de operación como independiente, de remolque o en configuración madre-hija.

Flexibilidad:

El eQart se construye utilizando los mismos bloques de construcción que los carros manuales de manejo de materiales de FlexQube. Hemos añadido algunos bloques de construcción automatizados, y esto conforma el sistema automatizado más versátil y flexible del mercado. No toma más de dos minutos para remover una estructura superior de bandejas si se necesita cambiar el transporte de cajas o bolsas a pallets. Ninguna otra solución automatizada puede ofrecerle este nivel de flexibilidad. Usted indica el tipo de estructura superior que necesita en función de los materiales que está moviendo, y si estos cambian, usted puede cambiar.

Costos:

Como hemos mencionado anteriormente, el costo de comprar un AMR es considerable. No es inusual ver precios de un robot llegar a $70,000USD. Dependiendo de dónde están ubicadas sus instalaciones en el mundo, podría ser más barato descartar este tipo de automatización y continuar utilizando mano de obra para transportar los materiales. Sin embargo, el eQart tiene un precio de $25,000USD, convirtiéndolo en una de las soluciones de automatización más asequibles del mercado. Esto hace que el eQart sea un caso de negocio mucho más razonable, sin importar dónde sea su ubicación.

Robustez:

El eQart es bastante robusto. La plataforma plana estándar puede soportar cargas de hasta 2300lb/1000Kg, lo cual lo hace una de las soluciones automatizadas más robustas del mercado. Las vigas y las placas están hechas de acero de alta calidad. Debido a la capacidad de cambiar fácilmente los bloques de construcción, lo hace muy útil en el caso de que alguna parte necesite reparación o cambio de estructura superior.

Implementación:

Así como también mencionamos anteriormente, el tiempo de implementación para muchos de los AMRs es considerable. Con esto, no solo toma tiempo sino también una cantidad significante de costos. El costo de configurar la infraestructura del wifi y contratar consultores que configuren las rutas más efectivas, es considerable y son complementos del costo de compra inicial. El eQart es guiado ópticamente con una cinta grabada. Es esencial destacar que esta cinta no es magnética y lo único que necesita es establecer un contraste para que sea seguido por el eQart. La implementación de este tipo de ruta se puede contar en horas y no en días, semanas o meses. Dependiendo del tamaño de la ruta que necesite, la implementación puede ser completada para utilizar el eQart inclusive el mismo día de su entrega. Además de esto, se pueden configurar diferentes estaciones utilizando las etiquetas RFDI en la cinta. El eQart viene con la habilidad de trazar la ruta en la Tablet y usted, como operador, puede señalar cada estación como lo necesite.

Facilidad de Operación:

Finalmente, desde el principio del desarrollo del eQart, nos hemos enfocado en asegurar que el eQart es fácil de usar para todos. Esto incluye las personas que trabajan abajo en las líneas, los operadores. Si bien los AMRs son muy avanzados en el modo de navegación y cómo pueden cambiar la ruta cuándo un obstáculo está en la vía, también significa que tienen un nivel más alto de complejidad para el uso diario. Esto es intimidante no solo para los gerentes de la compañía sino más aún para los operarios que trabajan en las líneas. El eQart viene con una tableta amigable que hace muy sencillo alterar las rutas, enviarlo de regreso a una estación, hacerlo girar 90 o 180 grados, etc. Esta facilidad de uso ha ahorrado muchos dolores de cabeza a los clientes y estamos seguros de que esta simplicidad es una ventaja distintiva cuando se inicia el camino hacia la automatización.

El eQart y los AMRs ambos tienen distintas fortalezas y debilidades. Los AMRs son mucho más avanzados en su navegación, lo cual hace la navegación entre obstáculos muy fácil, pero puede causar otras dificultades con relación a tiempo de implementación, costos y facilidad de uso. Por otro lado, si bien el eQart no viene con navegación natural, tiene otras ventajas en el costo por unidad, facilidad de implementación y flexibilidad. Todo se reduce a cuáles son sus necesidades y objetivos con su proceso de automatización.